Encontré en www.biblia.com algunas estadísticas interesantes referentes a líderes evangélicos, pero que a la vez preocupan por que extrapolándolo a las presiones que están sometidos los adolescentes y jóvenes estos números serian descomunales.
· En 2005 el número de visitantes mensuales a sitios de Internet pornográficos fue 75 millones (fuente). Las tendencias indican que tiene que ser mucho más ahora. Acordémonos que hace 20 años esta avenida ni siquiera existía.
· Videos pornográficos estrenados en 1988: 1,300. En 2005: 13,500. (fuente)
· Varias encuestas informales dicen que entre 50-70 porciento de hombres cristianos usan pornografía en el Internet. (fuente)
· Otras encuestas (ejemplo, una de la revista Christianity Today) dicen que entre 30-50 porciento de pastores en los EE.UU. usan pornografía. (fuente)
· 70% de hombres usan pornografía cada mes. (fuente)
· En una encuesta en los EE.UU. 57% de pastores dicen que adicción a pornografía en el Internet es el principal problema sexual en sus congregaciones. (fuente)
Ahora, estas estadísticas aplican primordialmente a los EE.UU. y tampoco las he verificado en fuentes académicas. Además vale notar que algunas seguramente no incluyen personas que no usan el Internet. Pero aunque no sean quizás exactas, todavía nos dicen algo y ese algo es que estamos experimentando una ola titánica de pornografía en el mundo hoy, y que es mayormente debido a la existencia del Internet”.
A la práctica de la masturbación se le llama: El pecado Oculto, El vicio solitario (ya que la otra persona no existe sino en la imaginación), el sexo solitario, Solo en una isla, etc. Es auto-estimulación y no estimulación sexual por medio de otra persona. Es una cuestión unipersonal, no interpersonal. Su defecto estriba en esto: toma lo que ha sido diseñado por Dios para ser un deseo poderoso que alienta una relación personal profunda, pero lo aborta. Aquello cuyo propósito era el compartir, se realiza en soledad. Pero si esto resulta triste y deprimente, apenas puede compararse con la terrible culpa que algunos sufren. Al tratar este tema no es para crear sentido de culpabilidad, sino mas bien para animar a aquellos que estén pasando por esta situación, a aumentar su fe y su disposición de buscar más de Dios para liberarse. Este tema es bastante serio y no pretendo poner cargas a los jóvenes que disminuyan su fe en vez de edificarles. Prefiero dar pasos prácticos para salir de esta atadura.
Cuide sus oídos: Evite ser expuesto a conversaciones que le provoquen deseos sexuales indebidos. Esto incluye la lectura de material de índole sexual.
Discipline sus ojos: Evite ser expuesto a material pornográfico que le excite sexualmente. Evite mirar las personas del sexo opuesto que le atraigan más de lo necesario.
Limite sus manos: No toque lo que no debe tocar.
Siempre este acompañado. Es bueno tener amistades honestas y sanas.
Cuando vayas a la cama que sea cuando tengas mucho sueño.
En la mañana al despertar levántate lo más rápido posible. No hagas castillos en el aire.
Algunos pasos del proceso para superar la masturbación: Tomado del Libro: Manual para Consejeros de Jóvenes. Autor: Josh McDowell / Bob Hostetler. Editorial: Mundo Hispano.
1. Sé honesto con Dios. Reconoce que los pensamientos lascivos que te llevan a la masturbación son un pecado contra Dios. Sé honesto en cuanto a tu pecado y pide que seas limpiado y decide dejarlo.
2. Planta una estaca. Una "estaca" es un punto fijo que marca el comienzo de un viaje. Decide si quieres complacer a Dios más de lo que te quieres complacer a ti mismo y decídete a hacer tuyas estas palabras: "Andad en el Espíritu, y así jamás satisfaréis los malos deseos de la carne" (Gálatas 5:16).
3. Enchúfate al poder. Reconoce que no puedes ganar esta batalla con tu propio poder Sólo por medio de Jesucristo viviendo en ti puedes cambiar tus deseos y hábitos. Empieza ahora mismo a dedicar cada día un momento regular y constante con el Señor.
4. Renueva tu mente. Este problema empezó en tu mente, así que deja que Dios te la cambie. La manera en que Dios renueva tu mente es el compenetrarte en la Biblia. Es allí donde se encuentran los pensamientos de Dios. Anhela que los pensamientos de él sean los tuyos. Lee cada día un capitulo de la Biblia. Memoriza un versículo por semana.
5. Enfoca tu vista. Aparta tus ojos de cualquier cosa que te estimule sexualmente. Es obvio que no puedes vivir en un monasterio, así que tus ojos verán objetos sexualmente estimulantes. Pero no sigas mirándolos, especialmente los materiales y revistas pornográficas, las novelas de TV o las películas catalogadas como triple XXX, páginas de Internet, etc.
6. Controla tu cuerpo. Cuando sientes que tu cuerpo va a explotar si no te alivias un poco de la presión sexual, manténla bajo control por medio del ejercicio físico, haciendo el bien a otros, o dedicándote a actividades físicas divertidas (como andar en bicicleta o jugar al baloncesto, hacer cualquier tipo de deporte).
7. Sincérate con un amigo Maduro. Pídele a alguien de tu mismo sexo, que sea espiritualmente maduro, que te haga rendir cuentas de tus actos. Consigue que te pregunte regularmente si estás evitando la lascivia, lujuria, fornicación, etc.
8. Evita las situaciones tentadoras. No mires una segunda vez a la persona vestida sensualmente, y no leas revistas ni mires programas en TV o en el Internet que te estimulan sexualmente, Manténte en guardia cuando estás solo, especialmente donde es fácil sentirte tentado.
9. Sigue adelante a pesar de tus fracasos. Si fracasas, no te desanimes. Te llevó tiempo formar este hábito, te llevará tiempo quitártelo. Si caes, no te revuelques en el lodo: más bien levántate, Libérate por medio de confesar inmediatamente tus pecados y de recibir, por fe, el perdón de Dios. Pero no te acostumbres a aceptar trivialmente tus fracasos.
10. Empéñate en la victoria total. No tienes que pecar. No tienes que dejar que el radiador se recaliente. Al ofrecerte a Dios (en lugar de ofrecerte al pecado como instrumento de maldad), tu energía sexual se canalizará para hacer de ti un hombre o mujer poderosa para Dios. Confía en Cristo. Obedécele. El te dará la victoria.
J&A
2 comentarios:
fucking shit es parte del hombre la masturbacion ayuda a concoer su cuerpo lo dice la ciencia, no nos adoptrinen
Al comentar acerca de este tema, la intención ha sido de ayudar a aquellos que al "conocer su cuerpo" han quedado esclavo de ese "conocimiento".
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